sábado, 20 de marzo de 2021

   

Primavera 2021

Federico Cantú Garza









La Escuela Mexicana de Pintura Y Escultura no solo lego una riqueza incalculable en patrimonio artístico, de paso logro generar una riqueza económica nunca antes vista. 

 

Decía Cantú: Antes de conocer a Inés Amor yo viví años en  Paris donde vi morir de hambre amigos tan cercanos como Cesar Vallejo. Inés nos hizo valer como artistas cuando se ganaba mas siendo profesor de idiomas.

 

En 1948 con animo de sumergirse en el universo de las culturas mesoamericanas,

Federico Cantú , pinta las primeras versiones de Xilonen , Xochipilli y la Luna Coyolxauhqui , esta iconografía  dará forma a los murales Teotleco de 1950 y que posteriormente integrara a las Enseñanzas de Quetzalcóatl . Ya en 1960 inaugura en la Unidad Independencia IMSS los relieves que adornan el Teatro Independencia 

 

Pronto el proyecto IMSS lo lleva a desarrollar una serie de relieves en Nuevo León y de ahí a los Altares , en el camino de la carretera  Linares – Galeana donde esculpe otra gran obra monumental con Ceres- Chicomecóatl

 como figura central 









 

Los Altares

 

Colindaban las huertas de las casas de Edelmiro Rangel y Adolfo Cantú Jáuregui, padres de Raúl Rangel Frías y Federico Cantú, respectivamente. De allí nació la amistad de estos prohombres de la cultura local.

 

Entusiasmado finalmente por la idea de Federico, don Raúl le recordó al artista que sólo contaban con 250 mil pesos, pero que agregaría 100 mil pesos más.

"¡Yo pongo el resto!", comentó Cantú, hijo de la escritora María Luisa Garza "Loreley", quien pondría de su bolsillo 45 mil pesos. "¡Nomás por darme el gusto!".



 

Bo

2021-03-20

miércoles, 3 de marzo de 2021

  Federico Cantú 1907-1989

3 de marzo de 2021 natalicio de Federico Cantú Garza 1907-1989
El 3 de marzo recordamos el natalicio de uno de los grandes maestros del arte : Federico Cantú Garza . Originario de Cadereyta de Jiménez NL ,se convertiría en uno de los grandes maestros del arte nacional .
El legado Mural que Federico, es sin duda un tesoro que podemos apreciar a lo largo y lo ancho de nuestra nación, su pintura de caballete ha recorrido los principales museos de América y Europa , incluyendo el MOMA, L.A. Museum, Smithsonian , Museo Vaticano etc.
Federico se formo en la Escuela al aire libre de Coyoacán con su maestro Alfredo Ramos Martinez , quien lo impulso para residir en Paris durante una década.
Cuando cumplí catorce años , sentí el ansia de Paris. Los Libros de mi madre y las novelas románticas con teatro en la Ciudad Luz, me alucinaron ; me sedujeron al grado de convertir en obsesión lo que en un momento fue embriaguez espiritual..
Un amigo Pintor, de imaginación multiforme, descubrió en mi cierta intuición artística, me esbozo un paraíso de color inimaginable , de suyo preparo un mapa de la Ciudad Luz. …. Inquietante y seductora idea. ….No se necesitaba mas que eso y un boleto de tercera clase de los trasatlánticos , esa cosa inmunda y pavorosa que se extiende en la Cala de los barcos desde la proa a la popa y que nos separa, de la misteriosa verdosidad de los mares, con un muro de acero.
Y es así estimulado por mi maestro viaje a Paris.








Federico se convirtió en uno de los grandes muralistas y fue maestro fundador de la Escuela “La esmeralda” y del Salón de la Plástica Mexicana”
Este año recordamos su natalicio con grandes exposciones que nos muestran el arte mural, la pintura de caballete , la escultura y el grabado al buril.
El apego personal de Federico Cantú a la obra de Paris se revela al incluir una serie de testimonios reiterados en su biografía y por supuesto en ese incansable camino recorrido en su obra de caballete y mural donde Paris siempre estará presente, a manera de radiografía de su vida errante, que lo llevara acuñar el seudónimo de “El Ulises de Cadereyta”
Su vida como pintor y escultor, su vida entera, ha sido honesta y ejemplar. Ha realizado tanto como ha querido. Y viene lo dicho por Romain Rolland a propósito de Händel
Es como un océano inmenso al que todos los ríos del Universo no podrán calmar la sed ni turbar la serenidad.
Adolfo Cantú
CYDT Collection